SEPA es el espacio europeo de armonización de los medios de pago.
De esta forma, los actores económicos de la zona SEPA (empresas, comerciantes, particulares y administraciones) podrán realizar, dentro de esta zona, pagos en euros con idénticas condiciones y con la misma facilidad que en sus respectivos países.
La zona SEPA incluye 37 países:
El objetivo del proyecto SEPA es crear «un mercado de pagos integrados, competitivo e innovador para el conjunto de los pagos en euros» (Banco Central Europeo, 2006).
Con la aplicación de condiciones técnicas, jurídicas y tarifarias similares para los países de la zona, SEPA permite: